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Tanto en el trabajo visual como en el sonoro aparece una idea de superposición de materiales “naturales” y “tecnológicos”. Entre comillas, ya que ambos aparecen de forma extraña. Los sonidos de aves son repetidos incansablemente, como si se tratara de una máquina, y el material con una textura difícil de reconocer se convierte en un elemento orgánico y de cualidades impredecibles. Lo visual, se incorpora también construyendo diálogos entre los materiales plásticos y virtuales, superponiendo pintura al óleo y edición digital. “Conjunción” se puede comprender como un ejercicio de suma de capas, de experimentación de texturas y producción de extrañamientos a partir de formas ilegibles. Piezas que remiten a un imaginario oscuro, denso, tonalidad que se asemeja a ese azul invernal que aparece entre las 7 y 9 de la tarde, con materialidades sonoras y visuales difíciles de identificar, y que invitan a una aproximación sensible y atenta ante la incertidumbre de la noche.

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